A lo largo de los años he aprendido que si no disfrutamos la forma de hacer ejercicio se vuelve una imposición, un “deber” y eso tiene una carga muy fuerte. Existen formas de aprender a disfrutar el deporte, a continuación te daré otros consejos para lograr una rutina duradera y con buenos resultados.
Inicia con la energía que pones al pensar en esta actividad. Me explico mejor, si piensas en el esfuerzo o el dolor, te aseguro que la experiencia no resultará agradable, pero si te concentras en el resultado final y como se verá el cuerpo, después de haber practicado constantemente una rutina de ejercicio, alcanzarás el resultado. Tomemos como ejemplo lograr un abdomen plano, necesitas una rutina para abdomen con ejercicios para la zona baja, media y alta, si mientras estás haciendo esta rutina visualizas que tu cuerpo ha logrado el objetivo, tendrás más ánimo para seguir con el ejercicio, el dolor o esfuerzo pasa a un segundo plano.
Haz de cualquier actividad física algo divertido, cuando algo nos agrada podemos pasar más tiempo cultivando esa actividad. Yo pasé muchos años en el gimnasio, había épocas en que sinceramente pagaba membresía al gimnasio y no iba. Cada vez que pensaba en ir, mi cuerpo se rebelaba; estaba muy cansada, tenía mucho trabajo. Me inventaba todas las excusas para no pasar por el centro deportivo. Ahora estoy inscrita y cuadré mi horario para poder hacer la clase que más me gusta (zumba), lo cual me motiva todos los días y ha ido cambiando mi percepción sobre los centros deportivos.
Ejercita tu centro o core, en el centro de nuestro cuerpo se encuentra la energía vital, la fuerza de nuestra personalidad. Según la sabiduría oriental nuestro cuerpo consta de 7 grandes centros de energía en el abdomen se encuentra el chakra del plexo solar donde se encuentra toda la fuerza de quienes somos como personas. Cuanto más entramos en contacto con esta zona del cuerpo, más sintonizados nos sentimos con nosotros mismos.