Me encanta hablar de autoestima, precisamente porque ha sido muy poco el tiempo en que me he sentido tan feliz conmigo misma. Cualquier persona creería que por haber sido reina de belleza sería la persona más segura del mundo; totalmente falso. Aunque tenía todos los atributos, no me sentía conforme conmigo misma. Faltaba un centavo pa’ el peso. Tuve que sufrir un accidente, para iniciar el camino hacia el amor propio, que todavía no he terminado de recorrer.
La mayoría de mujeres sufrimos de inseguridad, este no es un post para aprender a sentirte segura si has batallado con el peso toda la vida. Es un post que incluye a todas las mujeres y el eterno batallar a sentirnos enamoradas de nosotras mismas. Mostrarte algunos mecanismos que me han servido para ver lo mejor de mi. Espero te sirvan a ti también.
Celebra que eres una Dura
Lo primero y más importante es tener claro que Somos unas Duras, somos las heroínas de nuestra propia historia. Muchas personas no solo es cosa de mujeres, no nos damos crédito por lo que hacemos. Unas son excelentes madres, han hecho cosas heroicas por sus hijos, familia y a la vez trabajo. Otras cambian sus carreras porque quieren seguir fieles a su vocación y algunas nos dedicamos a lo que nos gusta sin pensar en la retribución económica, sino cuantas vidas podemos cambiar. Esto no tiene nada que ver con el cuerpo pero si te crees que eres “Batichica”, estoy segura que te sientes más bella.
Lo que no te gusta es tu mejor atributo
¡A veces son varias partes!. El problema para mi siempre fueron las caderas, más que eso los conejos (esa grasa que se concentra a los lados debajo de la cola)
Cuando sucedió mi accidente, lo peor fue ver las cicatrices, siempre me lamentaba de tenerlas, hasta que alguien me dijo “Qué pasaría si ni siquiera tuviera cicatrices de las cuales estarte lamentando”. Ahí me di cuenta que lo más importante es poder caminar, poder correr, bailar en tacones. Puede que mi cuerpo no sea igual al de hace 10 años sin embargo ha tenido la capacidad de recuperarse y reaprender funciones tan vitales como caminar.
Ámate como a la persona a quien mas amas
Si tú no te amas primero ¿Cómo nutrir el amor hacia los demás?, llega un momento en que te desdibujas dentro del panorama. Hace muy poco tiempo dejé de escuchar a mi implacable juez interior, reconociendo que sus juicios estaban llenos de odio y no aceptación, lo cual no sólo es contraproducente sino que empieza alejarte todas las cosas que quieres. Ese juez interior es como tener un jefe que constantemente te disminuye, ¿Cómo te sientes motivado a trabajar así?. Es muy diferente a un jefe que te apoye, respalde y de ánimos… Sobre todo que crea en ti. Trabajarías mejor así, ¿No?. Es así como nuestro subconsciente responde si escucha esa charla negativa que tenemos todo el día en nuestra cabeza. Por eso piensa en ti siempre de manera positiva.
Si tienes otras mecanismos para aprender a amarnos, compártelos con nosotros.
