Se acaba la temporada de lluvias y llega el sol, o bueno ese es mi deseo. Lo cierto es que ya estamos en junio y para algunas personas esto significa vacaciones. Un selecto grupo opta por salir a buscar refugio en la altura de las montañas y ver una noche estrellada, mientras otras personas buscamos el calor del sol y que los rayos del astro rey permeen el cuerpo, para lograr un bronceado ligero o muy oscuro según las preferencias.
Sea cual sea el plan que vayas a hacer en vacaciones, es importante el cuidado de la piel sobre todo en estos momentos; la radiación solar afecta cada vez y la exposición a rayos UVA/UVB causa daños en la piel. No importa que te encuentres en la playa con el sol abrasador del mediodía, en el frío del páramo o incluso en tu casa frente a la luz (de un bombillo o los equipos electrónicos como celular, Ipad e incluso TV). Inicia cuidando tu piel y haciéndola lucir más joven, saludable y bella con estos tips:
Aplica protector solar 3 veces al día
No basta con aplicar bloqueador solo cuando vamos a salir a la calle para protegernos del sol, o al comenzar el día. El protector solar es un rejuvenecedor facial envasado si se usa en repetidas ocasiones durante el día, ya que impide que los rayos UVA/UVB penetran en la piel e impidiendo manchas y líneas de expresión causadas por el sol. Eso si busca un protector que tenga un SPF 30 o más. En el artículo “Protege tu cuerpo del sol en verano” puedes ver como usar bloqueador para broncearte.
Evita fumar
¿Y que tiene que ver con la piel? Mucho, resulta que hay algunas toxinas en el humo del cigarrillo y agentes cancerígenos al inhalar la bocanada de humo, que no solo hacen daño a la presión arterial y al cuerpo en general, sino que es uno de los mayores culpables de que se forman las líneas de expresión alrededor de la boca o surcos nasogenianos, por el constante gesto de inhalar. Además, los componentes del cigarrillo le quitan oxígeno y nutrientes al organismo, dañando la producción de colágeno y elastina, que tienen la función de mantener la piel firme.
Ten una rutina de belleza para la piel
Lo más importante es usar productos adecuados para las necesidades de tu piel, tanto en el rostro como en el cuerpo. Los jabones con emolientes naturales ayudan a mantener la piel hidratada, secar el cuerpo dando suaves palmaditas con la toalla, también ayuda y por supuesto usar una crema hidratante es todavía mejor.
Evita las cámaras de bronceo
La mejor opción para broncearse son los productos autobronceadores. Dejan un color canela en la piel sin el efecto de los rayos UVA/UVB, que además de causar envejecimiento prematuro o manchas, pueden causar cáncer en la piel.
Aliméntate saludablemente
La alimentación es clave para la piel, como dice el viejo refrán “eres lo que comes”. Si tienes una dieta alta en vegetales, frutas, granos y proteínas magras, tu piel se verá más saludable y joven. Tomar abundante agua durante el día ayuda a mantener la piel hidratada.
Evita exfoliar todos los días
La exfoliación nos da un sentido de limpieza pero a su vez puede ser muy abrasivo con la piel y quitarles los aceites naturales. Por eso es recomendable una rutina de limpieza con productos hechos para tu tipo de piel, recomendados por tu dermatólogo de cabecera.