Existen varios sistemas para saber que colores lucen específicamente a tu color de piel, ojo y cabellos. Uno de los más detallados es 12 estaciones de color; se basa en las 4 estaciones principales (primavera, verano, otoño e invierno) las cuales se dividen en 3 categorías cada una definida según la temperatura, intensidad y valor (brillo) del color.
De los 3 aspecto del color nombrados arriba se desprenden 6 características dominantes en una persona, así:
Según la temperatura la tonalidad es:
Cálida: colores con un matiz de amarillo.
Fría: colores con un matiz azul.
Según la intensidad (croma):
Suave: Una coloración clara y delicada como la de Gwyneth Paltrow.
Intensa: Una coloración oscura, fuerte como la de Kim Kardashian
Según el valor:
Brillante: colores vivos y brillantes, sin gris dentro de su composición.
Opaca: Colores con un poco de gris.
Para determinar a cuál de las 12 estaciones perteneces, en vez de mirar primero la temperatura que más luce a tu tono de piel, debes analizar cuál de esas características nombrada anteriormente es dominante en ti. Luego analizas si los colores que mejor te lucen son cálidos o fríos y por último si los colores que te favorecen son claros u oscuros.
Según esta teoría las estaciones se dividen así:
Invierno fuerte: colores fríos y vivos.
Otoño fuerte: colores cálidos y fuertes.
Primavera clara: colores cálidos y vivos.
Verano claro: Colores fríos y opacos.
Invierno brillante: colores fríos y fuertes.
Primavera brillante: colores cálidos y suaves.
Otoño suave: colores cálidos y opacos.
Verano suave: colores fríos y vivos.
Primavera cálida: colores vivos y claros.
Otoño cálido: colores claros y fuertes.
Verano frío: colores suaves y claros.
Invierno frío: colores vivos y fuertes.
Es un poco más complejo que la teoría de las cuatro estaciones pero a la vez con mayores posibilidades porque no todas las mujeres caben en la teoría de las 4 estaciones: algunas mujeres de tonalidad fría se pone negro y no le luce, otras pueden usar colores cálidos o fríos y les quedan bien.